Hay personas que por las razones que sean, o por motivos que aparentemente nos resultan inexplicables, se esconden en algún rincón de nuestro corazón y permanecen allí durante mucho tiempo. Parecieran perdidos en la memoria, olvidados, ocultos de toda posibilidad de recuerdo.
Pero entonces, también por cosas que son ajenas a nuestro entendimiento, la vida se reacomoda y esas personas vuelven a estar en nuestro camino. Basta un ligero esfuerzo de nuestra memoria, basta tocar algunos puntos sensibles de nuestra capacidad de recordación y aflora toda la belleza de un pasado que creíamos olvidado.
Y entonces el corazón también responde. Y las sensaciones, las emociones y hasta los sentimientos guardados por tanto, tanto tiempo, están ahí de nuevo. Como si nada hubiera pasado; como si apenas hubiese sido ayer.
Texto: Dario
Hola Prof. Dario!
ResponderEliminarClaro que nos conocimos hace ya muchos años... El colegio, que bonita época... También recuerdo al Padre Manzanita con cariño.
Gracias por el mensajito...
Escribes muy bonito ;)
Muchos Saludos!!
Tienes Razón. Cada vez que compartimos un saludo, una sonrisa,un te quiero, un abrazo, un café, una copa etc. El sentimiento de amistad día a día se va fortaleciendo y por eso estas en un rinconcito de mi corazón. Un Abrazo.
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